Barenboim y Beethoven 11: La última sonata de Beethoven I

Si alguien que no conoce la música de Beethoven escuchara su última sonata para piano, op. 111, y su primera, se sorprendería por las diferencias en cuanto a expansión tonal y formal, espontaneidad motívica y arquitectura compositiva —incluso, es probable que no pudiera creer que se trata del mismo compositor—. Pero Daniel Barenboim —luego de habernos llevado por el periodo medio de Beethoven, con sus sonatas «Waldstein» y «Appasionata», y con la Eroica— explica que hay «una cualidad inequívoca» en sus obras tardías, cualidad que representa «un desarrollo lógico a lo largo de toda su creación». Este episodio de Barenboim y Beethoven se enfoca en el primer movimiento de la última sonata: «de la música más intensa que se ha escrito» y en la cual Beethoven se revela como «un maestro de las formas pequeños».