Barenboim y Beethoven 3: Forma... La «Waldstein»

«La forma que mejor le acomodaba [a Beethoven] era la forma sonata», declara Daniel Barenboim. Esta se basa en «la creación de una unidad a partir de ideas y temas en oposición».

Para este tercer episodio de la serie Barenboim y Beethoven, grabada en 1970 por Christopher Nupen, el pianista y director se vuelva en la monumental Sonata «Waldstein» —una de las sonatas más sustanciosas y técnicamente demandantes de un corpus de 32 sonatas para piano— en el que revela la gloriosa síntesis de «los elementos más contrastantes... tanto en la vida como en la música» que encarnaba el compositor. En este mismo episodio, Barenboim habla con elocuencia, además, del rol del intérprete, de la necesidad de tocar una pieza cada vez como si fuera un descubrimiento, con el objetivo de «imbuir la música con nuestro propio espíritu» y demostrando cómo es que esto se consigue, cerrando con una interpretación llena de bravura del primer movimiento de la sonata.