Leonard Bernstein dirige la Sinfonía n.° 5 de Shostakóvich

Este concierto de archivo excepcional muestra, como si fuera la primera vez, la naturalidad y el dominio que tenía Leonard Bernstein sobre toda partitura que tuviera enfrente. Con una London Symphony Orchestra contagiada de la intensa energía que caracterizaba al director norteamericano, esta interpretación de la Quinta Sinfonía de Shostakóvich se alza entre las más celebradas, pero sobre todo entre las más conmovedoras de la música grabada.

Escrita en 1937, la sinfonía llegó a ser dirigida por Bernstein en presencia del compositor, quien celebraría la interpretación. La partitura ha sido descrita como «un documento creativo de supervivencia y renacimiento» (Fay/Fanning, The Grove Dictionary of Music and Musicians) y, según se tiene registro, hizo llorar al público en el movimiento lento, quien ovacionó la obra durante treinta minutos, celebrando una catarsis comunal ante la opresión del régimen que en aquel momento sembraba el terror con la Gran Purga.