Ravel y la infancia

La imaginación, el juego y la inocencia son elementos que no faltan jamás en la obra de Ravel. Sabemos que su infancia fue feliz y que estuvo marcada por una pasión especial por las cosas artísticas y que sus padres motivaron que se convirtiera en músico; y es claro que un sentido del descubrimiento y la experimentación inagotables permanecieron en él durante toda su vida, especialmente en obras como L'Enfant et les Sortilèges (una de sus dos óperas, presente aqui además en su versión ballet), obra donde un los juguetes de un niño cobran vida para darle una lección; Mamá oca, con La bella y la bestia y La bella durmiente representados en música ensoñadora, que podrás encontrar aquí tanto en su versión original para piano, en la orquestación del propio Ravel ¡y en un ballet que te quitará el aliento!